domingo, 20 de septiembre de 2015

VIVIENDO EL TIEMPO NUEVO

Muchos hablan de las energías de este mes de septiembre, que para mí empezó dos días antes de la segunda luna llena de agosto, la luna de la cosecha. Como estoy inmersa en un proceso de desconexión exterior para afinar mi reconexión interior, apenas he leído nada al respecto, así que no opinaré. Solo quiero decir que AL FIN estoy empezando a vivir el tiempo nuevo y creo que eso tiene que ver con las energías que están siendo movilizadas en la Tierra. Siento que es un momento perfecto para ir hacia nuestro centro y conectar con nuestra esencia, buscar nuestra verdad para poder construir -desde la individualidad- un proyecto colectivo orientado a la creación de una nueva Tierra. Que nadie se sienta solo ante los desafíos. Auténticas revoluciones están ocurriendo ahora dentro de muchos seres humanos... Y recordad que un solo ser humano es capaz de promover grandes transformaciones colectivas: Martin Luther King, Nelson Mandela, Teresa de Calcuta, Vicente Ferrer, Pepe Mujica... Cualquiera de nosotros. Tú, ¿por qué no? Un mundo nuevo lo necesita todo nuevo. Un mundo nuevo te necesita a ti... Y a ti... Y a ti... Y a mí también. Pero nos necesita nuevos, transformados, auténticos.

Es por responsabilidad con este proceso de transformación interior-exterior que sigo viviendo en un relativo silencio social pues, ¿cómo si no podría oír la voz de mi alma guiándome en el peligroso paso del Estrecho de Magallanes? Es tiempo de verdad y de coraje, de atreverse aunque el miedo siga ahí, tentándonos para que jamás crucemos el puente. Pero solo al otro lado del puente podremos encontrar aquello que tanto y tanto hemos estado buscando, la respuesta a la gran pregunta: ¿QUIÉN SOY YO? En la vida solo hay un trabajo a realizar: NOSCE TE IPSUM, CONÓCETE A TI MISMO. Tan simple que nos asusta. Tan necesario que ninguno de nuestros más íntimos anhelos será posible hasta que saboreemos la respuesta a esta pregunta sagrada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario